Ingredientes:
500 gramos de patatas peladas y cortadas a rodajas.
Una lata de espárragos trigueros (yo IGP Huétor Tájar).
200 gramos de nata (crema de leche) espesa.
150 gramos de queso cheddar.
100 gramos de queso curado (en la receta original queso Lancashire).
3 huevos.
Sal, pimienta y nuez moscada.
Un paquete de masa brick.
100 gramos de mantequilla fundida.
Elaboración:
Comenzamos cociendo las patatas peladas y cortadas en rodajas. Deben estar 8 minutos en agua hirviendo.
Una vez listas les retiramos el agua y las ponemos en un bol. Las chafamos para hacerlas puré y les añadimos la nata (crema de leche) espesa y los quesos rallados.
Añadimos finalmente los huevos ligeramente batidos junto a la sal, la pimienta y la nuez moscada molida.
Reservamos la mezcla y mientras preparamos el molde. Para ello lo forramos con las capas de masa brick (yo puse diez láminas). Entre lámina y lámina pincelamos bien con la mantequilla derretida.
Vertemos la mezcla sobre la masa brick y colocamos sobre ella los espárragos trigueros.
Finalmente horneamos a 180º, con el horno precalentado, unos 20 minutos o hasta que veamos que está cuajado y los filos doraditos.
Mi agradecimiento al Consejo Regulador de la Denominación de Origen Específica Espárrago Huétor Tájar por hacerme llegar unas estupendas latas de sus trigueros en aceite de oliva virgen extra.