750 gr. de pollo troceado
1 bote de guisantes
1 Tomate
1 bote pequeño de tomate frito Hida
1/2 pimiento rojo
1/2 pimiento verde
1 cebolla
2 dientes de ajo
1 hoja de laurel
Harina
1/2 vaso de vino blanco
1 vaso de agua
1 pastilla de avecrem
Aceite de oliva
Sal
Pimienta negra
Salpimentamos el pollo y lo doramos en una sartén. Cuando esté, retiramos el pollo y los ponemos en una cazuela.
Limpiamos y cortamos la verdura (pimiento rojo, pimiento verde, cebolla y dientes de ajo) en trozos muy pequeños, y los pochamos en la misma sartén que hemos dorado el pollo.
Cuando estén blanditas, añadimos el tomate (pelado y troceado) y el bote de tomate Hida, y mezclamos bien.
A continuación, añadimos una cucharadita de harina para que la salsa espese, y removemos para que no se pegue.
Incorporamos el vino blanco y subimos el fuego para que evapore el alcohol.
Echamos el sofrito en la cazuela junto al pollo y añadimos el laurel, el agua y la pastilla de avecrem.
Cuando comience a hervir, añadimos los guisantes, tapamos la cazuela y cocinamos 45 minutos (si los guisantes son congelados, descongelarlos y añadirlos a la cazuela cuando queden 15 minutos de cocción). Iremos removiendo para que no se pegue.
Pasado este tiempo, ya podemos servirlo.