Lo mismo da que sea verano o invierno, el almuerzo o "Esmorzaret" como le decimos aquí, no puede faltar de 9 a 11 de la mañana, más o menos.
Nuestro almuerzo no es sólo comer algo, en nuestro almuerzo se come pero también se habla, se disfruta con los amigos, y todo acompañado de una botella de vino tinto o de unas cervezas.
El esmorzaret es sagrado para nosotros, es una cultura valenciana....."la cultura del almuerzo", se puede almorzar con tapas de plato o con bocadillos, una rua como decimos en Castellón.
Por si no conocéis las sardinas de bota, os diré que son sardinas saladas y secas...en salazón, están elaboradas siguiendo un proceso artesanal y tradicional que hace que tengan un sabor y textura exquisitos.
La salazón de la sardina se hace con el pescado entero, se le somete a un proceso de salado en salmuera y prensado, luego se pasan a un recipiente circular de madera llamado cuba o bota.
Antiguamente las sardinas de bota te las vendían envueltas en papel de estraza, y cuando llegabas a casa se ponían con ese mismo papel en el marco de la puerta, donde están las bisagras, se cerraba la puerta un poco y así se aplastaba la sardina para conseguir que se soltara la espina y las escamas.....aún recuerdo a mi padre haciéndolo!!
A mis padres este almuerzo les encantaba, mi madre hacía el mejor pimiento frito en el aceite de las sardinas.
Este plato es muy sencillo de hacer, pero hay que seguir unos pasos:Primero de todo hay que preparar las sardinas desescamándolas y quitando la cabeza y las tripas.
Se utiliza el mismo aceite para freirlo todo, primero las sardinas para que suelten y se acentúe la salazón, luego los pimientos y por último el huevo para que coja todo el sabor de los otros ingredientes.
Ingredientes: (para 2 personas)
2 sardinas de bota.
2 pimientos verdes.
2 huevos.
Aceite de oliva virgen.
Modo de hacerlo:
Primero de todo vamos a limpiar las sardinas:
Quita la cabeza de las sardinas.
Ponlas envueltas en papel de horno y golpéalas con una maza de madera o algo duro.
Quita con cuidado todas las escamas, lava y seca las sardinas.
Una vez tengas las sardinas limpias, desescamadas y sin cabeza, ponlas a freir en una sartén con aceite a fuego suave. Cuando estén doraditas, saca y reserva en un plato.
Fríe en el mismo aceite los pimientos limpios, secos y enteros, dora por los dos lados. Saca y ponlos en el plato con las sardinas.
Fríe los huevos en el mismo aceite, sácalos y ponlos en el plato.
Y recuerda acompañar siempre de una buenas rebanadas de pan para mojar el huevo y el aceite tan sabroso que queda en el plato....
Fuente: este post proviene de Mandarinas y Miel, donde puedes consultar el contenido original.
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