He pensado que podíamos hacer una receta otoñal a la vez que hyggelig, mi versión de la receta de Skibberlabskovs que viene en el libro Hygge. La receta de la felicidad del que ya os he hablado y recomendado en más de una ocasión.
Originariamente, esta receta se preparaba en los barcos, de ahí su nombre. Es un plato de cuchara reconfortante, por lo que es una receta ideal para cuando el frío del otoño da la cara.
Los ingredientes que vamos a necesitar para mi versión de esta receta para seis personas son los siguientes:
100 g de mantequilla
2 cebollas grandes
850 g de magro de ternera
5 hojas de laurel
12 granos de pimienta
550 ml de caldo de pollo
1 kg de patatas
1 manojo de cebollino
sal
pimienta
El magro de ternera se puede sustituir por pechuga de pollo o sobras de carne que tengamos, lo que hace que esta receta sea más hyggelig.
En cuanto al caldo, podemos tener listo un litro por si necesitamos utilizar más durante la cocción. Además, si utilizamos caldo casero, hará esta receta aún más hyggelig.
Preparación:
Cortamos la carne en trozos de tamaño regular, como de un bocado. Podemos pedirle a nuestro carnicero que nos lo prepare y así ahorramos tiempo.
Pelamos la cebolla y la picamos en brunoise. Reservamos.
Vertemos el caldo en un cazo, lo ponemos al fuego y lo llevamos a ebullición.
Por otro lado, ponemos una olla al fuego e introducimos la mantequilla. Cuando se haya derretido, agregamos la cebolla y cocinamos hasta que quede translúcida.
Añadimos la carne, el laurel y los granos de pimienta. Removemos hasta que la carne cambie de color y vertemos el caldo hirviendo. El caldo debe cubrir la carne y la cebolla. Agregamos un poco de sal, tapamos y dejamos cocer a fuego lento durante 45 minutos.
Mientras, lavamos las patatas, las pelamos y cortamos en trozos de tamaño regular, similar a los trozos de carne. Ponemos la mitad de las patatas sobre la carne y volvemos a tapar.
Transcurridos 20 minutos, removemos y agregamos el resto de las patatas. Si vemos que necesita más caldo, podemos añadir un poco. Cocemos a fuego lento durante otros 20 minutos, sin olvidarnos de remover de vez en cuando para que nuestro guiso no se pegue.
Lo probamos, salpimentamos y dejamos cocer 20 minutos más, sin tapar.
Presentación:
Espolvoreamos un poco de cebollino picado y llevamos la olla al centro de la mesa.
Servimos en platos hondos con ayuda de un cazo.
Lo podemos acompañar de un poco de mantequilla, remolacha en conserva y pan de centeno.Con estos ingredientes, podemos hacer unas tostas untando la mantequilla en una rebanada de pan y ponemos la remolacha por encima. ¡Está buenísimo!
Bon appétit!