El otro día prepare pasta fresca para las niñas, unas cintas anchas de pasta con salsa de tomate casero. Como me suele pasar, hice más pasta y más tomate de la cuenta.
Se me ocurrió rellenar la pasta como si se tratase de un ravioli gigante o de una empanadilla de pasta fresca. Rellené la pasta con la carne y la cocí. La sumergí en la salsa de tomate y quedó espectacular. Nos gustó mucho a todos.
El caso es que nunca había visto ni oído hablar de estos pedazos de ravioli tan enormes y buscando por la web encontré que les llaman ravioloni.
Este es el relleno que tenía preparado de "boloñesa": ternera picada salteada con verduras y salsa de tomate.
Como nos gustó tanto, hoy los he preparado usando un relleno que tenía preparado, una especie de boloñesa y un pesto de nueces y orégano fresco. Otro éxito.
Pesto de orégano fresco y nuecesTengo un par de macetas de orégano en mi terraza que por esta época están llegando a la floración. Les tomé prestadas unas cuantas ramitas y con ellas he preparado una especie de pesto con unas nueces y aceite de oliva del bueno.
Un ravioloni cerrado y otro antes de sellarloTras poner un poco de "boloñesa" en cada rectángulo de pasta fresca, los cerré como me salió en ese momento, tipo empanadilla o calzone. No se explicar muy bien como porque no tengo una técnica para estas cosas, simplemente me limito a cerrar lo mejor que puedo para que no se salga el contenido.
En 3 minutos se cuecen perfectamente en agua hirviendo (no a borbotones, moderadamente) estos ravioloniUna vez cerrada la pasta, la sumergí en abundante agua con sal para que se cociera. En tres minutos están en su punto y gracias a mi forma de cerrar la pasta, el contenido no se había desparramado por el agua, continuaba donde tenía que estar, en el interior de la pasta. Ni una pequeña fuga.
Una vez cocidos los dejé reposar sobre papel de cocina para que no tuvieran demasiada aguaTras la cocción, pase los ravioloni a un papel de cocina. Cuando los hice la otra vez, los sumergí directamente en la salsa de tomate, pero como esta vez solo iban a llevar por encima el pesto, la parte jugosa estaba en su interior, creí conveniente escurrirle un poco el agua de cocción, para que en el plato no se me formara ningún charco desagradable.
Los ravioloni emplatados con el pesto y queso rallado por encima (en este caso es un queso manchego curado)Ya emplatados, los cubrí con el aromático pesto, con unas virutas de queso manchego curado (desde hace un tiempo solo utilizo producto nacional) un chorrito de aceite de oliva y listos.
Como podéis ver en esta foto quedaron superjugosos y el contraste de la boloñesa con el pesto de orégano y nueces quedo de 10
Como podéis ver tanto en las fotos como en el vídeo, no puede tener mejor pinta. Pues bueno, si los hacéis os daréis cuenta que además están buenísimos.
Os dejo con el vídeo de cómo los preparé.
Saludos...