Ingredientes (para 4):
Pan (200 gr)
Ajo (8)
Pimentón dulce (1 cs)
Guindilla cayena -u otro picante de tu gusto-
Salsa de tomate frito (80 gr)
Jamón serrano (80 gr)
Aceite de oliva (4 cs)
Agua (1 l)
Sal
Pimienta
Huevo (2)
Preparación:
Pela y corta los ajos en láminas.
Corta el pan en rebanadas.
Corta el jamón en daditos.
Prepara una olla a fuego medio-alto con un par de cucharadas e aceite de oliva.
Añade el ajo laminado y espera que "baile" en el aceite caliente. Controla el fuego para que el ajo no se dore más de la cuenta.
Incorpora las rebanadas de pan y saltéalo un poco junto al ajo.
Añade la cayena u otro picante de tu agrado y en la cantidad que estimes oportuno.
Añade pimienta molida.
Incorpora una buena cantidad de pimentón dulce.
Seguido al pimentón, sin darle tiempo a que se queme, añade la salsa de tomate frito y remueve.
Cubre con agua.
Sazona a tu gusto.
Deja cocer a fuego suave durante unos 15 minutos.
Bate el huevo y añádelo removiendo para que cuaje en forma de hilo.
Añade el jamón picado.
Sirve.
Pocos ingredientes pero que sean de calidad.
Lo primero es sofreír suavemente los ajos.
Incorpora el pan y saltéalo un poco junto al ajo.
Yo voy añadir picante en forma de guindilla cayena pero puedes usar chile fresco, en puré (de rocoto, de ají, Harissa...) o no poner picante.
Un buen pimentón debe ser bueno para que la sopa quede rica.
Antes de que se pase el pimentón añade la salsa de tomate frito.
Cubre con agua y deja cocer unos 15 minutos a fuego suave.
Pasados los 15 minutos de cocción añade un huevo batido y remueve para que cuaje en forma de hilo.
A mi me gusta añadir el jamón en el último momento, no me gusta el jamón serrano (ibérico en este caso) cocinado.
El plato de sopas de ajo o sopa castellana servido.