Mi última entrada del blog es del mes de febrero y esto demuestra algo que ya sabía. Es complicadísimo conciliar un trabajo que te exige dedicación total con una alimentación medianamente saludable (y con otras muchas cosas más). Para conseguirla es necesario dedicarle tiempo, no sólo para cocinar en casa, también para buscar los ingredientes que no se pueden comprar en cualquier supermercado a las nueve de la noche. No porque sean cosas raras, más bien porque me gusta comprar en los mercados o tiendas de barrio donde la procedencia de los ingredientes frescos me da más confianza. Nunca compro fruta, carne o pescado en grandes almacenes si es posible.
Si no encuentro tiempo para hacer cosas sanas y saludables para alimentarme yo, imaginaros lo de alimentar este blog… pasa a la última de mis prioridades, pero eso no quiere decir que no haya día que el sentido del deber no me atormente.
Con la vuelta de vacaciones somos muchos los que venimos con la lista de buenos propósitos, y en la mía, intentar volver a los buenos hábitos está en los primeros puestos. Y no me refiero a dejar de pecar con dulces o ponerme a dieta estricta. Me refiero a volver a la alimentación consciente, a dejar de comer en la medida de lo posible todo aquello viene envasado y a hacer de nuevo el pan y los dulces para saber lo que me llevo al estómago.
Así que inauguro la temporada otoñal que está a punto de llegar con una tarta de queso que llevo tiempo viendo por algunos foros de cocina que suelo seguir. Por lo visto hay un restaurante en San Sebastián que se llama “La Viña” que es famoso por su tarta de queso. Y a mí, entre lo que me gusta este tipo de dulces y lo fácil que es la receta, me conquistó al momento.
Yo la hice con sirope de ágave e hice alguna modificación, pero si la vas a hacer con azúcar o con panela puedes seguir la receta de Rosa Ardá que tiene en su blog Velocidad Cuchara. No hace falta la Thermomix para hacerla, de hecho yo la hice con batidora.
Ingredientes
1 kg. de queso fresco tipo Philadelphia
500 ml. de nata (crema de leche) (yo usé nata (crema de leche) para montar con más de un 35% de material grasa, pero para la próxima la haré con la de cocinar para aligerar)
5 huevos
225 gr. de sirope de ágave (si usas panela puedes poner 300 gr.)
60 gr. de almidón de maiz, yuca… (la típica Maicena o cuaquier otro almidón). Si usas panela puedes poner la mitad de cantidad.
Modus Operandi
Mezclar todos los ingredientes, bien con la batidora o con la Thermomix 30 seg. V.6.
Untar un molde de unos 24 cm. con mantequilla o forrar con papel de horno. Yo pongo el papel en el fondo y unto de mantequilla los laterales. Así me es más cómodo para sacarla.
Volcar la mezcla en el molde y hornear 50 minutos a 200º, calor arriba y abajo.
No sacar directamente del horno, dejar reposar y templar con la puerta entreabierta.
Yo le puse una capa de mermelada de albaricoque casera que tenía, pero está igual de buena sin nada, o con otra de frutos rojos.
Para esta vuelta al cole recomiendo solo escuchar canciones que os llenen de energía. Yo me acabo de topar con esta de “The Fratellis” que hacía mucho tiempo no escuchaba. Recurriré a ella cuando esté bajo mínimos.