INGREDIENTES
Tomate cherry
Azúcar (misma cantidad que tomate)
Ajo (1 diente por cada 150 g)
Pimienta de Jamaica (1 bola por cada 150 g)
ELABORACIÓN
Limpiamos los tomates y los pesamos.
A continuación, en un cazo ponemos la misma cantidad de azúcar que lo que pesen los tomates. Con la misma cantidad de agua. Y llevamos a ebullición.
Cuando veamos que el azúcar ya se ha derretido, echamos los tomates, el ajo y la pimienta.
Hervimos cinco minutos, y apagamos el fuego. Lo dejamos enfriar sin apartar del fuego).
Cuando enfríe, volvemos a repetir la operación, ponemos a hervir, cuando comience a hervir, lo dejamos 5 minutos, apagamos y dejamos enfriar.
En ese momento, los tomates ya estarán listos, nos quedaría comprobar el espesor del almíbar. Si consideramos que está suficientemente espeso, volvemos a calentarlo hasta la ebullición para luego guardarlo en un frasco de cristal, taparlo, darle la vuelta y conservarlo, como la mermelada.
En caso de que queramos un almíbar más espeso, calentamos, sacamos los tomates y los reservamos, hervimos hasta conseguir la textura deseada, echamos los tomates y pasamos al frasco de cristal para su conservación.