Esta receta es muy sencilla de preparar y nos aportará muchísimos beneficios a nuestro cuerpo.
Cabe destacar, debido a los betacarotenos y al aporte de vitaminas y nutrientes de los ingredientes, el cuidado a nuestra piel aportándole hidratación, reduciendo los efecto nocivos de los rayos UV y evitando el envejecimiento prematuro.
Con la llegada de la primavera, debemos empezar a preparar nuestra piel, ya que necesita hidratarse y protegerse.
En un solo plato, obtendremos todas las propiedades que nos aportan estas increíbles hortalizas.
Esperamos que os guste y la incorporéis en vuestro recetario.
Ingredientes
3 patatas medianas
2 zanahorias grandes
1 branca de apio sin las hojas
¼ de cebolla
1 litro de caldo de pollo o la misma cantidad de líquido y una pastilla de caldo concentrado
Aceite de oliva
Sal
Preparación
Primero, pelaremos, lavaremos y trocearemos la patata y la zanahoria y las dejaremos reservadas.
Lavaremos, que retiraremos las hebras laterales y trocearemos el apio, cuando lo tengamos preparado, lo reservaremos.
Pelaremos y picaremos la cebolla y, también la dejaremos reservada.
Pondremos al fuego, una cazuela con un chorrito de aceite, y añadimos la cebolla y dejaremos que se vaya pochando.
Agregaremos las patatas, las zanahorias y el apio y removeremos bien.
Dejaremos unos 5 minutos para que se vayan rehogando todas las verduras.
Añadiremos el caldo y dejaremos al fuego, hasta que las verduras estén tiernas.
Retiraremos del fuego y lo batiremos todo, con la ayuda de la batidora, hasta que nos quede una crema fina.
Si la preferimos más fina, podéis pasar la crema por un colador.
Volveremos a llevar al fuego, removemos y dejaremos 5 minutos más para que se caliente un poco.