Va de aceite y vinagre, ¿lo sabías?

Usos y tipos de aceite y vinagre para cocinar

El aceite y el vinagre son dos productos básicos de la dieta mediterránea. Desde el aceite de oliva o el aceite de girasol hasta productos relativamente nuevos en el mercado español, como el aceite de coco o el de palma, desde el vinagre de vino al de arroz o los vinagres balsámicos…

Estos productos figuran entre los más empleados en las cocinas españolas, pero, ¿conoces todos los tipos de aceite y vinagre para cocinar? ¿Cuáles son las mejores marcas de aceite de oliva? ¿Dónde comprar vinagre blanco o vinagre de manzana? Te descubrimos la respuesta a estas y otras muchas preguntas para ayudarte a la hora de la compra.

Propiedades del aceite de oliva

España cuenta con 262 variedades de aceite de oliva, según la interprofesional Aceites de Oliva de España. Nuestro país produce cerca de la mitad de aceites de oliva consumidos a nivel mundial, con un 25% de la superficie de olivar del planeta.

Este increíble alimento cuenta con muchas propiedades beneficiosas para el organismo. Su consumo regular reduce el riesgo de ictus y problemas cardiovasculares, colesterol o diabetes y mejorar las facultades mentales. Además, se trata de un producto totalmente saludable, adecuado también si queremos una dieta baja en grasas.

Tipos de aceites para cocinar

Aunque el aceite de oliva es el rey indiscutible de este mercado, el mundo del aceite es mucho más extenso. Si quieres un producto saludable, los expertos recomiendan apostar por el aceite de oliva virgen extra, pero también hay otros aceites, como el de coco o el de sésamo, con aplicaciones culinarias muy interesantes si te gusta conocer sabores nuevos.

·         Aceite de oliva: En el lineal del supermercado podrás encontrar cuatro categorías básicas:

Aceite de orujo de oliva, elaborado a partir de residuos de aceitunas. Es el aceite de peor calidad y, aunque no se recomienda para consumo en crudo, sí resulta muy adecuado para freidoras.

Aceite de oliva refinado: se obtiene mezclando aceite normal y aceite virgen.

Aceite de oliva virgen: de aroma afrutado, con una acidez máxima del 2%.

Aceite de oliva virgen extra: el de mayor calidad, de aroma afrutado y sin defectos, con una acidez máxima del 0,8%.
·         Aceite de girasol: Es el segundo aceite más común, más barato aunque con menos propiedades que el aceite de oliva. Además de su uso para freidoras, el aceite de girasol también es muy habitual en la cocina asiática, con muchos platos que requieren un sabor neutro.

·         Aceite de lino: De sabor muy suave, rico en Omega 3, 6 y 9. Este aceite resulta muy adecuado para mayonesas, ensaladas o tostas.

·         Aceite de coco: Su consumo se ha puesto muy de moda en los últimos años por sus propiedades saludables.

·         Aceite de palma: Propio de la gastronomía del África subsahariana, muy indicado para repostería y bollería casera.

·         Aceite de sésamo: Con aroma tostado, ideal para aromatizar arroces, salteados y platos orientales.

·         Aceite de cacahuete: Típico de la cocina africana y del sudeste asiático, va muy bien para ensaladas.

Marcas y precio del aceite de oliva

Para acertar comprando aceite de oliva, es importante leer detenidamente la etiqueta con la información del fabricante. Como hemos comentado antes, un aceite de oliva virgen extra es muy diferente a uno refinado y su precio también lo es. Además, durante los últimos años el sector ha ampliado su oferta, especialmente en el ámbito de la producción ecológica. En cuanto a marcas de aceite de oliva, el aceite Carbonell o Coosur Virgen Extra figuran entre las opciones favoritas de los consumidores españoles, pero también puedes encontrar novedades como el Aceite Soleada Gourmet o Ecológico.

En cuanto al precio del aceite de oliva, el aceite de oliva virgen extra ronda los 4,47 euros el litro, según datos de la OCU. El precio medio del aceite de oliva virgen se sitúa en 4 euros por litro, y el aceite de oliva refinado, 3,73 euros por litro. En el caso del aceite de orujo de oliva, el litro cuesta unos 2,5 euros. Si quieres ahorrar comprando aceite de oliva, apuesta por las marcas blancas y los formatos grandes, como las garrafas de cinco litros.

Vinagres para cocinar

El vinagre es otro de los condimentos más utilizados en la cocina, usado desde hace siglos tanto para aromatizar y dar sabor como para conservar los alimentos. En España, el más habitual es el vinagre de vino pero si miramos al resto del mundo encontramos otros muchos tipos. En Estados Unidos, por ejemplo, se utiliza vinagre de cereales; en Asia, vinagre de arroz, y en Latinoamérica, el vinagre se elabora con manzana o alcohol de caña.

¿Qué tipos de vinagre podemos encontrar hoy en el lineal del supermercado? Estos son algunos de los más usados en las cocinas de todo el mundo:

·         Vinagre de vino: Sin duda, el más usado en las cocinas europeas, especialmente en países como Italia o Francia. El vinagre de vino tinto es ideal para realzar el sabor de las carnes rojas, mientras que el vinagre de vino blanco se usa más para encurtidos, conservas y salsas envasadas.

El vinagre blanco también puede elaborarse con melaza, caña de azúcar, maíz o alcohol de remolacha. Además de usarse en crudo para aliños y ensaladas, el vinagre blanco tiene también interesantes propiedades para la limpieza y la belleza. Si quieres comprar vinagre blanco, presta atención a los usos recomendados por el fabricante.

·         Vinagre de Jerez: Perfecto para gazpachos, salsas o carpaccios.

·         Vinagre de manzana o de sidra: De sabor suave y delicado, ideal para pescados, ensaladas, carnes blancas, mariscos…

·         Vinagre balsámico: Estos vinagres, como el  de Módena, encantarán a los paladares más gourmet.

·         Vinagre de arroz: Muy usado en países como Japón o China, con propiedades antisépticas y beneficioso para el corazón.

El aceite y el vinagre, como el que puedes encontrar en el supermercado online Condisline, cuenta con innumerables posibilidades en la cocina. Con la llegada del verano, estos condimentos te ayudarán a darle el punto perfecto a tus salsas, ensaladas y fritos, entre otras muchas aplicaciones gastronómicas. Ahora, ¡solo queda ceñirse el mandil y ponerse manos a la obra!